“El adiós le duele a quien se queda.”
Sabía que debíamos hablar, sin mascaras, sin tapujos, sin mentiras. El dolor de saber que ibas a ser papá, me derrumbo, las lágrimas rodaban por mis mejillas, sentía como quemaban, como dolían, mi corazón ya no resistía, solo quería escapar... No aguante debía hablarte y te envíe un mensaje, pienso que fue un error, necesario, pero un error.No se espero tu respuesta, agresiva, desafiante, retadora, y en ese momento me di cuenta de lo inevitable, eras otra persona, una que yo no conocía. Te pedí que habláramos, tu contestación, seca, fría, entonces pensé que era la ocasión para liberarme, no quería conocer al hombre con el que hablaba, ese no eras tu, ese ser humano que me cautivo, el amoroso, el detallista, el tierno, el que se desesperaba cuando yo no le decía que lo amaba, el que siempre quería que le dijera palabras bonitas, el que no quería perderme, y el que en nuestras locuras y nuestras travesuras, me gritaba que me amaba.
Definitivamente ese no eras tu. Pasaron minutos hasta que decidiste hablar conmigo, mas por compromiso que por que tu quisieras. Tus palabras entre veladas me hicieron pensar que por cosas del destino ya no ibas a ser papá, ni siquiera eso quise preguntar¿¿¿¿????
fuerte y segura te dije simplemente que no volvieras a preocuparte ni por mi ni por mi familia, todos te dejaríamos en paz. Perdiste oportuni-dades que nunca ima-ginaras, pero fueron tus decisiones, es cierto que las oportunidades se presentan una vez en la vida y en uno esta aceptarlas o rechazarlas, tu......las rechazaste. Fue una conversación diferente sentí que no eras R, ..........
entonces pensé que el que estaba al otro lado de la línea era el que me había lastimado, el que me traiciono, un ser despreciable, mezquino, que en esta conversación no perdió oportunidad para decir cosas para lastimarme, que era consciente que con lo que me decía martirizabas mi corazón, sintiendo en cada momento tu mala energía. Quería gritarte tantas cosas, descontrolarme, hacerte sentir miserable, pero no esa no debía ser la actitud, al contrario trate de estar calmada, ni te percataste de esto, sentía que nada te importaba. Mien-tras decías cosas sin sentido, pensaba que mi R era un hombre de verdad, digno, integro, ese nunca me hubiera traicionado, de ese.... siempre estaré enamorada. No quería escucharte, quería colgar dejarte así, como tu me dejabas últimamente, pero mi brazo no respondía, toda yo estaba congelada.
Querías jactarte que yo aun no podía estar sin ti, te equivocaste, toque fondo, si, pero ya no, este R no lo vale, amare siempre al R original a mi R, a ti te desprecio, no me importan tus cosas, no me importa tu vida, solo reflexiono y se que la vida te dará tu propio castigo, te enfrentaras a situaciones donde mi recuerdo te mortificará, habrá momentos que en tu propia desesperación miraras al pasado y te darás cuenta de lo que perdiste, y en esos momentos, si dejas que el R que amo resurja, entonces dile que Lore, el amor de su vida siempre estará para él
Adiós mi adorado R, no sabes que dolor siento en haberte perdido, que otro se apoderada de ti, que hayamos perdido eso tan bonito que nos unió. Espero que algún día pueda hablar de ti con orgullo, sin dolor, le diré a la gente que pregunte, que en país de América Latina se quedo mi corazón y aunque vivo, desde el 20 de Noviembre solo tengo un corazón artificial que me permitirá sobrevivir pero no vivir. Tu recuerdo sera mi aliento para seguir, adiós mi amor.
“Ella no ha dejado de quererlo.
Él ya no la recuerda”
Me iré de mi tierra de mi adorado país, buscaré otros lugares, otras personas, pondré distancia entre los dos, será lo mejor, la tentación de volar hacia a ti es muy fuerte y ante todo hoy debo tener dignidad. Se que debo ser fuerte, pero que difícil es.....
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